Todo tiene un ritmo.
Nada sigue firme.
La calada es fuerte
en este orbe de sobre.
El hombre se pierde
en un perdido limbo.
Sigo desperdiciando,
fieles al derroche.
Condenamos nuestras almas
al azar de los timos.
Solo te confundes.
Yo solo me desprendo.
Si el fuego prende,
al agua comprendo.
Solo viajan ciertos trenes.
Después vienen los lamentos...
Somos jóvenes y no aprovechamos
lo que tenemos.
Todos tienen fiebre,
espera que enfermo.
No hay versos si hay suerte.
Tu te sientes muerto.
La verdad es una falacia libre
y la vida,
la siesta del esqueleto.
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1 comentaris:
Interesante y certero pensamiento, somos un "esqueleto", que a veces se duerme, y no aprovecha el momento, y estamos para que se mueva y aprender a cada segundo.
Abrazo
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